En la anterior entrada del blog vimos la evolución del concepto de los edificios inteligentes, el como está moldeado por la tecnología, y como se ha transformado de un sistema cerrado e independiente a uno abierto e integrado.
Debemos recordarles a los lectores de que los edificios inteligentes sirven como una plantilla, una guía para el diseño, construcción y gestión de edificios eficientes. Agrupa todas las posibles innovaciones y mejores prácticas en un modelo. Arquitectos, ingenieros, y gerentes de construcción pueden adoptar varios aspectos, como en el caso de Deloitte building in Amsterdam.
¿Por qué son importantes los Edificios Inteligentes?
Varios factores están impulsando el caso económico por adoptar el enfoque y la tecnología de los Edificios Inteligentes.
En primer lugar, los habitantes de todo el mundo son cada vez más urbanos. Según la OMS[1], la población urbana en 2014 representó el 54% de la población mundial, un aumento del 34% desde 1960, y se espera que aumente a un 66% en el 2050. En otras palabras, las ciudades sumarán otros 2.5 billones de personas en el año 2050, junto con los 3.9 billones del presente. Esto está elevando el valor del espacio urbano, transformando Edificios Inteligentes en soluciones económicas. También está aumentando los organizadores urbanos y desarrolladores a idear formas creativas de optimizar el espacio urbano.
En segundo lugar, restricciones de recursos, presiones de sostenibilidad y mayor conciencia ambiental están haciendo reaccionar a las empresas y a las políticas gubernamentales; soluciones de red inteligente, los cuales se están desplegando alrededor del mundo para optimizar el consumo de energía, se superponen a las soluciones de edificios inteligentes.
En tercer lugar, iniciativas de datos abiertos, mediante las cuales las autoridades públicas comparten su datos con el publico general para incrementar la eficiencia de sus servicios, están propulsando el desarrollo de ciudades inteligentes. De nuevo, la tecnología de las ciudades inteligentes se superpone a la de los edificios inteligentes.
En cuarto lugar, desde finales de los 90 ha habido un cambio en considerar el coste total de la propiedad en vez de los costes de capital iniciales. Esto confirma que los propiedades de edificios y operadores deberían apostar por un ratio de 1:5:200 entre costes de capital, de construcción y de negocios operativos. También se está poniendo mas énfasis en la productividad de los edificios y sus ocupantes. En otras palabras, el valor de los edificios hoy en día se extiende mas allá de los ladrillos y mortero con el que están hechos.
Resumiendo, la necesidad de políticas inteligentes urbanas, con sus diferentes usos del espacio y recursos y la habilidad de incrementar la productividad del usuario, están impulsando la adopción de edificios inteligentes. Lo que una vez fue una colección de elementos caros deseables se está convirtiendo radicalmente en obligaciones caros y efectivos.
En la siguiente entrada del blog, profundizamos en el futuro de los edificios inteligentes.
Fuentes
[1] United Nations (2014). World’s population increasingly urban with more than half living in urban areas.
[2] Evans, R., Haryott, R., Haste, N. and Jones, A. (1998) The Long Term Costs of Owning and Using Buildings, London, Royal Academy of Engineering.